En el vasto universo de No Man’s Sky, donde millones de planetas esperan ser explorados, hay historias que se convierten en leyendas. Y esta es una de ellas. Un jugador, conocido en Reddit como Spirited_Ad3028, ha tocado el corazón de la comunidad gamer con una simple pero impactante frase:
“Solo puedo sentarme en mi nave, ver las tormentas eléctricas… y esperar a que se me acabe el oxígeno.”
¡Boom! Con esas palabras, compartió su trágico (pero increíblemente poético) final en el modo permadeath del juego. ¿La causa? Un aterrizaje en el planeta menos amigable del universo conocido. Rodeado de océano, con tormentas tóxicas azotando cada pocos minutos, sin combustible para despegar ni materiales para repararse, y con apenas segundos de vida fuera de su nave… la situación era más que crítica.
Pero aquí es donde se pone buena la cosa: su historia se volvió viral, tanto que ¡Sean Murray, el mismísimo creador de No Man’s Sky, reaccionó públicamente saludándolo como el héroe que claramente es. Porque hay que tener agallas para mirar la tormenta de frente sabiendo que no hay marcha atrás.
Los jugadores más veteranos sabrán que este modo de muerte permanente no perdona ni el más mínimo error. Y Spirited_Ad3028 lo descubrió de la manera más intensa posible. Aterrizó en ese planeta con lo justo y se quedó atrapado en un auténtico infierno climático, sin recursos, sin salida y con la esperanza desvaneciéndose con cada ola gigante.
¿El lado épico de todo esto? La comunidad no se quedó de brazos cruzados. En Reddit, ya hay quienes se están organizando para intentar rescatarlo, mientras otros le sugieren trucos de supervivencia dignos de película. Y quién sabe, quizás Hello Games le eche una mano desde lo alto con alguna actualización salvadora.
Mientras tanto, su partida quedará en pausa, como una cápsula del tiempo flotando entre tormentas, esperando que algún día pueda continuar su viaje. Porque sí, incluso una muerte en No Man’s Sky puede convertirse en poesía espacial.
Así que ya sabés, si vas a lanzarte a explorar el universo… ¡no olvides llevar suficiente ferrita!
